Onco-Hematología y Curas Paliativas

Los avances médicos en los tratamientos y el diagnóstico, cada vez más precoz, de las enfermedades oncológicas y onco-hematológicas, hacen que el cáncer se convierta, en muchos casos, en una enfermedad crónica, ya que aumenta la incidencia pero disminuye la mortalidad.

Este hecho, junto con el envejecimiento progresivo de la población, justifica el aumento de la prevalencia de personas con cáncer.

Así pues, muchas personas con cáncer pueden esperar volver a una vida normalizada, aunque no están exentas de desafíos. Como contrapartida a los efectos beneficiosos de tratamientos como la quimioterapia, cirugía, radioterapia, corticoides, tratamientos hormonales, etc. pueden aparecer efectos secundarios, como la dificultad para la movilización articular, cansancio, pérdida de fuerza, alteración del equilibrio y la coordinación, problemas respiratorios, dolor, osteoporosis, linfedema, incontinencia urinaria, problemas en la piel y la cicatriz... la propia enfermedad también puede causar muchos de estos problemas. Por lo tanto, tanto la enfermedad como los efectos secundarios de los tratamientos pueden provocar déficits que afecten a la calidad de vida de la persona con cáncer.

La oncología quizás no es uno de los ámbitos clásicos de la Fisioterapia, pero por otro lado tiene mucho que aportar, ya que juega un papel determinante antes, durante y después de la enfermedad.

Entendiendo la enfermedad como un proceso, la Fisioterapia puede ayudar en todas sus fases. Desde la prevención de la enfermedad promoviendo estilos de vida saludable, la prevención de las complicaciones derivadas de los tratamientos, la recuperación después de los tratamientos, y también en situación de enfermedad avanzada, dentro del equipo de cuidados paliativos.

El objetivo general de la Fisioterapia en oncología es mejorar la funcionalidad y la calidad de vida del paciente, ayudándole a adaptarse a su nueva situación en todos los aspectos e intentando reducir al máximo las secuelas de la enfermedad y los tratamientos. Todo esto lo hacemos desde el acompañamiento al paciente y a las personas de su entorno.

Desde la Comissió defendemos la intervención del fisioterapeuta en todo el proceso oncológico y en todos los ámbitos asistenciales.

• Promover el ejercicio físico en el paciente oncológico durante la fase de tratamiento activo de la dolencia.
• Difusión y actualización sobre la prevención del limfedema secundario en procesos oncológicos.
• 2020-2021. Difusión del rol del fisioterapeuta oncológico en diferentes ámbitos sanitarios (servicios de rehabilitación, oncología, atención primaria, etc.) y sociales (asociaciones de pacientes).